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Suspendido en Valencia un partido de juveniles por insultos racistas contra un jugador colombiano

    

“En el descanso avisamos que nos iríamos si continuaban los insultos”, apuntan desde el Historic


El CD San Lorenzo se compromete a identificar a los autores de los insultos. 3 abril, 2017


FERNANDO ÁLVAREZ. MARCA.- John, jugador del Histórics de Valencia, llegó a casa “con un raspón en el hombro y algunas moraduras en las costillas”, según relata Patricia, su madre. Pero no eran los golpes lo que más le dolía a este cadete de 16 años, convocado este fin de semana para reforzar el Juvenil. El partido contra el CD San Lorenzo de Massamagrell se había suspendido en el minuto 75 por insultos racistas contra John Edward Albornoz, estudiante de ESO nacido en Colombia, que vive en Valencia con su familia desde hace un año.


El árbitro reflejó en el acta el motivo por el que suspendió el partido en el minuto 75 y precisa diversos gritos desde la grada que se escucharon nítidamente en el campo: “Negro de mierda, eres un mono, uhh, uhh” (imitando el sonido de uno mono), puto moro de mierda que se cree bueno y todo. Tras estos insultos, el dorsal número 18 visitante se puso a llorar. En ese momento decidí suspender el partido”.


Todavía se le entrecorta la voz a Juan Bugatto, secretario del Histórics de Valencia, que se encontraba también en el Municipal de Massamagrell: “Los gritos empezaron en el minuto 20 de partido más o menos. Recuerdo expresiones como ‘A por el negro’ o ‘patada al negro’. Pero la hostilidad no venía solo de la grada. En el descanso le advertimos al árbitro que si proseguían los insultos, nos marchábamos”. El árbitro se lo dijo al entrenador local, que según relata el Historics en un comunicado, se justificó: “¿Qué hago?, ¿les pongo un esparadrapo?, ¿cómo vas a suspender el partido?, pasaría esto siempre en Primera división”.


“En la segunda parte -prosigue Bugatto- John recibió unas faltas que rayaban la violencia. Un empujón del portero sin balón y patadas”. El partido se había calentado también por el resultado (1-2 para los visitantes). Juan Sila, otro jugador negro del Historics, había sido objeto de penalti por una patada en la boca dentro del área. “No eran acciones normales, pero se podían entender como lances del juego. El árbitro los sancionaba y tampoco queríamos que fuera a mayores”, explica el secretario del Historics.


Pero a falta de unos 20 minutos para el final, con el balón en juego, tres jugadores locales rodearon a John, que se fue hacia la banda en una maniobra evasiva. Ahí empezaron los gritos de mono y el “uuhh, uuhh” desde el sector local de los aficionados. “John rompió a llorar y fue cuando el entrenador dio orden a los jugadores de que se fueran al vestuario. Entonces empezaron a llamarnos ‘cagones’ y cosas peores”, recuerda Juan Bugatto.


Los responsables del Historics llamaron a la Guardia Civil para evitar incidentes al abandonar las instalaciones. Pero cuando llegaron los miembros del instituto armado, ya no quedaba ningún familiar del equipo local en el recinto.


Massamagrell se compromete a colaborar


Este lunes, responsables del CD San Lorenzo de Massamagrell se han puesto en contacto con responsables del Historics para prometerles que van colaborar con las fuerzas del orden para identificar a los autores de los insultos racistas. A su vez, John acudirá con su madre para que el fisio del club observe las lesiones que le produjeron en el partido. Ese dolor pasará con el tiempo. En el club esperan que el daño que le provocan los insultos racistas también se pase y que no se vuelva a repetir.