22 abril, 2019. La Audiencia de Madrid avala el archivo de la investigación sobre la muerte del vecino senegalés de Lavapiés. «No se desprende el más mínimo vestigio de hostigamiento o persecución policial», explican los jueces
CADENA SER.- La Audiencia Provincial de Madrid ha decidido confirmar el archivo de la investigación judicial abierta en torno a la muerte de Mame Mbaye, ciudadano senegalés, hace un año en el barrio madrileño de Lavapiés. Los jueces rechazan que el paro cardíaco que provocó su muerte estuviese relacionado con una redada contra manteros que había presenciado minutos antes y también rechaza que recibiese una atención médica deficiente.
Los hechos ocurrieron el jueves 15 de marzo de 2018 en el centro de Madrid: Mbaye y un compatriota senegalés, ambos ‘manteros’ de la venta ambulante, huyeron a la carrera por el centro de Madrid hacia el barrio de Lavapiés tras presenciar cómo la policía perseguía a otros manteros a la carrera por la Puerta del Sol. Fue en la calle del Oso donde Mbaye, de 35 años de edad, se desvaneció falleciendo poco después de una parada cardiorrespiratoria. Padecía, según los médicos, una «patología cardiaca estructural asentada en el ventrículo izquierdo».
Fue la asociación SOS Racismo la que llevó el caso ante los tribunales y acaba de ser la sección segunda de la Audiencia Provincial de Madrid, en un auto al que ha tenido acceso la Cadena SER, la que ha decidido confirmar el archivo dictado el año pasado por el juzgado 48 de la capital. Con el apoyo de la Fiscalía, los jueces entienden que ni la Policía ni los servicios de emergencias fueron responsables de una muerte «natural» y califican las acusaciones de «afirmaciones apodícticas y especulaciones o conjeturas carentes de sustento objetivo».
Los jueces, con José Joaquín Hervás como ponente, no niegan que Mbaye huyese por «miedo a ser identificado» por los agentes que seguían a «otras personas», pero destacan que él en ningún momento fuese perseguido por la Policía. «No se desprende el más mínimo vestigio de que el fallecido se hubiese visto sometido personalmente a ningún tipo de hostigamiento o persecución policial previa que pudiera haber desencadenado los letales efectos de la patología cardiaca que presentaba».
Muerte natural
Los jueces llegan a esta conclusión tras estudiar el atestado, los informes médicos aportados al caso y la testifical del hombre que acompayaba a Mbaye cuando se desvaneció en pleno Lavapiés. No hubo persecución policial, dicen, ni tampoco un fallo en la asistencia médica del SAMUR: «No consta que el fallecido hubiese sido perseguido por la policía en ningún momento y, además, no indica la parte apelante cuál hubiese sido esa otra asistencia médica que pudiera haber evitado el fallecimiento».
La decisión de rechazar el recurso de apelación de SOS Racismo Madrid implica la confirmación del archivo del caso, explicando los jueces que no hay más pruebas que practicar sobre este asunto. Hablan los jueces de «la absoluta improcedencia de practicar nuevas diligencias de investigación, debiendo calificarse de impertinentes, inútiles y meramente prospectivas» las solicitadas por la acusación popular, que hablaba de posibles delitos de torturas o trato inhumano.
Indignación y disturbios
La muerte de Mame Mbaye en marzo del año pasado desató una oleada de protestas en el barrio de Lavapiés y unos disturbios que se saldaron con enfrentamientos con la Policía Nacional, contenedores incendiados y una sucursal bancaria también incendiada. Asociaciones y colectivos responsabilizaron de la muerte de este senegalés a la «persecución y acoso» que sufren los manteros en Madrid. Mbaye llevaba más de una década en nuestro país tras llegar en patera a Canarias.
Un día después fue el propio Ayuntamiento de Madrid el que afirmó que el fallecido no había sido objeto de persecución directa ese día por parte de agentes de la Policía Municipal. «No hubo ningún tipo de intervención policial frente a él o con él», aseguró el edil Javier Barbero. Recientemente, la también concejala Rommy Arce ha sido procesada por atribuir a la Policía responsabilidad en la muerte de Mbaye en su cuenta de Twitter.