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(EL PAÍS 27-05-2005)
La policía ha desmantelado una red de pederastas que abusaron sexualmente de nueve niños varones y, en algunos casos, los violaron. Entre las víctimas figuran cinco pequeños de entre 12 meses y dos años. El resto tienen entre tres y ocho años. Los tres pederastas que cometieron los ultrajes (un estudiante de Biología y dos informáticos, de 23 y 24 años) aparecen en la veintena de vídeos donde filmaron las vejaciones, siempre según la policía. Esas imágenes se distribuían por Internet. Las agresiones se cometieron en Madrid, Murcia y Vigo. Uno de los cinco detenidos se ofrecía como canguro. Entre los cinco hombres detenidos figuran tres agresores que aparecen en los vídeos grabados durante las vejaciones a los niños y que han reconocido su participación en los hechos, siempre según fuentes de la investigación. Dos de ellos son informáticos de 23 años: Álvaro. I. G., madrileño arrestado en Murcia ya encarcelado, y Eduardo. S. M., residente en Lleida y capturado en Barcelona que hoy pasará a disposición judicial. El tercero, José G. C., de 24 años, es estudiante de Biología. Fue detenido en Ourense y permanece en prisión. Además, los agentes arrestaron a otras dos personas en Murcia: Antonio O. M., fotógrafo y periodista de 43 años, acusado de tenencia y distribución de pornografía infantil y José C. C., socio comercial de Iglesias, por encubrimiento y posesión de pornografía infantil. Estos dos últimos, según Efe, han quedado en libertad con cargos.
La investigación, que ha permitido "desmantelar la estructura básica" de la red de abusos a menores -en palabras del ministro del Interior, José Antonio Alonso-, comenzó el pasado febrero, tras el descubrimiento de una red de pornografía infantil. "Por las declaraciones de los detenidos en aquella operación, en la que se encontraron algunas fotos de bebés violados, supimos que existía una persona, un tal Nanysex, que producía ese tipo tipo de pornografía y actuaba por Internet", explican fuentes de la investigación.
Un billete de tren
La Brigada de Investigación Tecnológica comenzó a rastrear ese nombre en Internet y pidió la colaboración de la secretaría general de Interpol, que remitió cuatro imágenes de la violación a un niño de poco más de un año. En ellas se observaba que el pequeño agarraba un billete. Era de tren de cercanías para la zona B-3 de Madrid (entre la capital y la localidad de Collado-Villalba, unos 40 kilómetros al noroeste) y se había expedido en la estación de Atocha en enero pasado.
Interpol envió una treintena de fotos más de la agresión. En una, aparecía una toalla con una zeta que resultó ser del Hospital La Paz (atiende a gran parte de la zona norte de Madrid). En otra, el pequeño estaba junto a un teclado de ordenador que contenía la letra eñe. Era, claramente, un caso español, pensaron los investigadores. Todas las imágenes llevaban el logotipo kova© todd. Estaban numeradas y compartían el mismo nombre, excepto una llamada nany private. Esto hizo sospechar a los investigadores que había relación entre Nanysex y la agresión al pequeño.
Las búsquedas cibernéticas y la colaboración de los proveedores de acceso a la red permitieron descubrir numerosas conexiones de Nanysex a la red. Buena parte se realizaban desde una tienda de la ciudad de Murcia, PC Tunning, dedicada a reparar y configurar equipos informáticos. La policía averiguó entonces que el gerente del establecimiento, Álvaro I. G., madrileño de 23 años e informático de profesión, había residido antes en Collado-Villalba. Investigó los pisos que arrendó allí y descubrió el cuarto de estar donde se cometió y grabó la agresión al niño. También averiguó que los padres del pequeño vivieron realquilados en la casa de Álvaro I. G. durante un mes.
Casi en el mismo momento, Interpol envió un vídeo con la agresión al mismo pequeño. En la cinta se observa fugazmente el rostro del hombre. Los investigadores descubrieron que se trataba del gerente de PC Tunning, que él es Nanysex y Kova, según las citadas fuentes. Los expertos determinaron que hay dos agresores y buscaron al segundo. Descubrieron que el pequeño agredido vivía en Murcia con sus padres, que luego fueron detenidos y puestos en libertad. Las pesquisas también llevaron hacia un proveedor de pornografía infantil en la red, Antonio O. M. El 19 de mayo se registraron varios domicilios, incluidos los de Álvaro (detenido ese mismo día) y Antonio. En este último se descubrieron 23 vídeos con agresiones a nueve pequeños y aparecen "perfectamente reconocibles" los rostros de tres agresores, según los investigadores.
Las mismas fuentes añaden que los vídeos muestran las agresiones sexuales (violaciones en algunos casos) a dos niños de dos y tres años de la localidad de Lo Pagán (Murcia), otros dos de Murcia ciudad (uno de 16 meses y otro de dos años), tres de Collado-Villalba (el de poco poco más de un año que figuraba en las primeras fotos, otro de tres y uno 12 meses). La policía considera que el agresor en todos estos casos fue Álvaro I. G., si bien las citadas fuentes añaden que en el primero detectado en Collado-Villalba también también intervino Eduardo S. M., alias Todd. Éste, ex fotógrafo de prensa, reconoció ayer haber estado en el lugar donde se cometieron algunas agresiones, pero negó su participación, informa Adrián Foncillas. Los vídeos tambien muestran agresiones a dos niños de siete y ocho años de Vigo (Pontevedra). En esas cintas aparecen Antonio G. C., alias Aza, y Eduardo S.M, según los investigadores.
Ministro Alonso: "Nunca he visto esta brutalidad, esta abyección"
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