El mismo fin de semana en el que el Catania y el Palermo se enfrentaban en la Serie A italiana, con el trasfondo del policía muerto hace nueve meses en el derby siciliano, el vandalismo regresó a los estadios. En esta ocasión fue en Serbia, en el Pequeño Maracaná de Belgrado, donde un policía resultó herido de gravedad al ser quemado con una bengala durante el descanso del encuentro entre el Estrella Roja y el Hajduk Kula. El agente tuvo que ser hospitalizado y está fuera de peligro.

El incidente sucedió cuando el policía, vestido de paisano, intentó detener a un hincha local que encendía una bengala en las gradas del estadio. Los compañeros del ultra del Estrella Roja acudieron en su rescate, por lo que el agente intentó escapar hacia la tribuna adyacente. No fue lo suficientemente rápido, así que cuando los ’hooligans’ le alcanzaron disparó dos veces al aire. Los radicales del club más laureado del fútbol serbio lograron derribarle y empezaron a golpearle y quemarle el cuerpo con una bengala.

La intervención de la policía antidisturbios no se hizo esperar y tras una pelea entre las fuerzas del orden y los ultras tres de ellos resultaron arrestados. Fuentes médicas informaron que la vida del policía herido no corre peligro.

El partido se reanudó tras los incidentes y el Estrella Roja igualó con el Hajduk Kula, lo que aleja a los belgradenses del liderato que ostenta el Partizan.