BARCELONA, 14 Ene. (EUROPA PRESS)

Los 16 mossos d'Esquadra imputados por el Juzgado de Instrucción número 5 de Figueres (Girona) por la paliza recibida por un inmigrante de origen marroquí, Driss Zraidi, en agosto de 1998 en la comisaría de Roses, siguen en activo pendientes de que se celebre el juicio oral por los hechos y no han sido en ningún momento suspendidos, desde el día de los hechos, de sueldo o trabajo, según hizo público Europa Press. El suceso tuvo lugar la madrugada del 3 al 4 de agosto de 1998 cuando la víctima fue detenida por una infracción de tráfico. Tras inmovilizarlo violentamente --según los escritos de la Fiscalía y de la acusación particular-- fue conducido a la comisaría, donde fue apaleado en varias ocasiones por diversos agentes mientras otros no hicieron nada para evitar las agresiones. Inicialmente, eran 20 los agentes imputados en la causa pero el juez ha decidido archivar las actuaciones respecto a cuatro de ellos, entre los cuales se encuentran dos sargentos, al no quedar acreditada su participación en los hechos. Según el auto de apertura de juicio oral, un total de 9 agentes participaron activamente en las diferentes agresiones sufridas por la víctima desde la detención. En este sentido, la resolución imputa al mosso José María G.A., la agresión cometida contra el extranjero en el momento de su detención, después de mantener una discusión. Al llegar a la comisaría de Roses, los policías José María G.A., Abel C.P., José Antonio M.D., Miguel S.S. y Antonio T. propinaron una paliza al detenido en la misma puerta del edificio. El juez instructor imputa al agente Carles L.M. un delito contra la libertad individual y a los mossos Francesc F.S., David M.S., Jordi M.E., David Q.R., Sergio S.M., José María G.A., Sergio S.M., Abel C.P., José Antonio M.D., Miguel S.S. y Antonio T. delitos de torturas graves en concurso con delito de lesiones.