(ACN). - Movimiento contra la Intolerancia denunciará al Ayuntamiento de Vic en la fiscalía si el ejecutivo español no actúa y el consistorio mantiene su negativa a empadronar inmigrantes 'sin papeles'. Así lo ha anunciado en declaraciones en el ACN el presidente de la ONG, Esteban Ibarra, que ha asegurado que la modificación que defiende al alcalde de Vic, Josep Maria d'Abadal, es 'ilegal' y atenta contra los derechos básicos de las personas.

Según Ibarra, es una medida 'a la italiana' y similar a las que ponía en marcha el desaparecido alcalde de Marbella Jesús Gil, que barría a los inmigrantes hacia otras localidades.

Movimiento Contra la Intolerancia pide al ejecutivo español que actúe de oficio delante un posible caso de discriminación, pero ya anuncia que si no lo hace será su ONG, y otros que trabajan en defensa de los derechos de los inmigrantes, quien lleve el caso delante de la fiscalía de delitos de odio y discriminación, una herramienta pionera creada a Catalunya en junio del 2007 que persigue los delitos con móviles racistas, sexistas o de intolerancia. Según Ibarra la decisión del Ayuntamiento de Vic de no empadronar los 'sin papeles' vulnera los derechos de los inmigrantes que recoge la legislación española, porque la posibilidad de cualquier ciudadano de empadronarse 'está amparada incluso en la Ley de extranjería', y por lo tanto 'si el Ayuntamiento adopta esta decisión, lo más probable es que incurra en una ilegalidad muy evidente'. Lo que no se puede hacer, dice, es 'seguir un modelo que en este momento está mucho en boga en Italia', es decir, 'ir quitando los derechos a gente que ya tiene pocos por el hecho de no tener papeles, y además trasladar problemas a ayuntamientos próximos como ya hizo Jesús Gil en Málaga, que generó muchas tensiones'. Además, afirma, el mensaje que lanza al Ayuntamiento de Vic es 'peligroso' porque 'si se estimula que las instituciones den la espalda a todos los sin papeles nos podemos encontrar un conjunto de ciudadanos muy desamparados y sin ningún apoyo institucional'.

En este mismo sentido, Ibarra recuerda que el empadronamiento es el principal instrumento que tiene un inmigrante sin papeles para demostrar el arraigo y poder regularizar su situación. Una persona sin papeles, recuerda, si  'se queda sin trabajo y sin permiso de trabajo, la residencia queda suspendida, y es fácil que pueda quedar en una situación de irregularidad sobrevenida que, si encima se agrava con la imposibilidad de empadronarse, puede derivar en una situación discriminatoria peligrosa'.

LA VANGUARDIA.ES 12.01.2010