EFE.- El ultraderechista partido griego Amanecer Dorado presentó hoy su propio borrador de ley antirracista, pero a diferencia de las distintas propuestas formuladas por las restantes formaciones, encaminada a penalizar toda apología nazi, la de los neonazis quiere castigar toda acción antigriega.
En su propuesta de ley, el partido ultraderechista, que ocupa 18 de los 300 escaños del Parlamento heleno, pide endurecer la legislación contra criminales extranjeros y acciones legales contra todo el que “distorsione la historia griega”.
En su borrador, Amanecer Dorado propone penas mínimas de dos años y multas de hasta 20.000 euros a toda persona que “niegue o minimice la importancia del genocidio contra los griegos”.
El Parlamento griego ha reconocido como genocidios el cometido contra los armenios (1914-1915) y las matanzas de los griegos de Pontos (norte de Asia Menor) en el periodo 1920-1922.
Sin embargo, no hay ley que penalice la negación de estos genocidios, como no está penalizada la negación de los crímenes nazis.
Con la propuesta de hoy, son ya cuatro los borradores remitidos al parlamento: uno conjunto de los dos socios progresistas de la coalición gubernamental (socialdemócratas e izquierda moderada), uno de los conservadores del primer ministro Andonis Samarás, y un último del principal partido de la oposición, el izquierdista Syriza.
La división en el seno de la coalición con respecto a la ley antirracista se produjo tras rechazar los conservadores una propuesta formulada por el ministro de Justicia, por considerar que bastaba con introducir algunas enmiendas a la ley existente de 1979.
Finalmente, los dos partidos progresistas presentaron un borrador que contempla imponer severas sanciones a los individuos y personas jurídicas que cometan actos de discriminación por razones de raza, origen étnico u orientación sexual.
La propuesta de los socios de centroizquierda contempla que la investigación y enjuiciamiento de los delitos por racismo y xenofobia se hará de oficio y no sólo después de la presentación de una denuncia, como ocurre hasta ahora y que ha impedido que numerosos ataques racistas lleguen a la Justicia por la condición de sin papeles de los atacados.
Igualmente, se castigará con penas de prisión de al menos seis meses y multas de 5.000 a 20.000 euros al que promueva la discriminación de forma pública y, en el caso de los partidos políticos, se les podría incluso retirar la financiación estatal.
Acto seguido, los conservadores de Nueva Democracia presentaron el suyo, incluyendo solo algunas enmiendas sobre la ley existente.
La nueva norma es necesaria para cumplir con una directiva europea que los Estados miembro debían haber aplicado a su legislación en 2010, pero que entonces Grecia no pudo sacar adelante por la oposición de la mayoría de diputados
Dada la actual división ninguna de las propuestas tiene posibilidades de éxito.
Los únicos partido que no han presentado una iniciativa propia son los comunistas del KKE y el partido derechista Griegos Independientes.