EFE.- El presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, Fernando Grande-Marlaska, ha abogado hoy en Salamanca por “una legislación integral” como “única forma de luchar” contra los denominados “delitos de odio”, del mismo modo que se ha hecho en relación con la violencia machista.

El magistrado ha clausurado en la Universidad de Salamanca (USAL) el congreso “Violencia de género: un problema de derechos humanos. Análisis, debate y propuestas” con la conferencia titulada “Igualdad real y efectiva… ¿cuándo?”.

En declaraciones a los periodistas, Grande-Marlaska ha estimado necesario “interrelacionar la violencia de género con el resto de manifestaciones que atentan contra el principio de dignidad humana, de igualdad, de trato no discriminatorio”, lo que se conoce, según ha apostillado, como “los delitos de odio”.

En este sentido, no ha considerado necesario una nueva legislación, sino una de “carácter integral” para “el resto de manifestaciones de discriminación” como ya existe en materia de violencia machista

En su opinión, es “imprescindible una ley integral que enfoque la cuestión en toda su complejidad en todos los ámbitos posibles como única forma de luchar”.

Ha asegurado que sí se ha avanzado en materia de regulación y en la concienciación de la sociedad”, pero que sólo “en cierta medida”.

De este modo, ha tildado de “frustrante” algunos resultados extraídos de recientes encuestas y en concreto del CIS que apunta a que “un 35 por ciento de los jóvenes, de entre 15 y 29 años de edad, no ven la gravedad de los celos y del control de la pareja”.

No ha ocultado su “decepción” al respecto porque todavía “algo falla” y se ha mostrado partidario de “hacer mucho más”.

Ha hecho hincapié en que la igualdad efectiva “todavía deja mucho que desear en el día a día”.

En materia de violencia machista, ha opinado que la ley ha traído “un enfoque global de la misma y ha sacado a la luz un tema tan grave que se vivía en el ámbito familiar”.

Grande-Marlaska ha apreciado bajo el número de mujeres que denuncian y también en clave estadística ha aseverado que aproximadamente “el diez por ciento de las mujeres puede sufrir malos tratos en algún momento de su vida”.

También se ha referido al “más de medio millón de denuncias” habidas en 2014 en relación a la violencia machista, número que también ha estimado bajo.

Finalmente, ha estimado relevante el esfuerzo que se están haciendo de las instituciones públicas para que las víctimas en la Administración, un “lugar de confianza”.