Froehlich fue expulsado del partido en 1994 al pedir en un mitin en Viena el fin de la intromisión de “cabrones multiculturales” en la sociedad austriaca. También son conocidos sus contactos en el exterior, según EL Centro de Documentación de la Residencia Austriaca, Froehlich testificó a favor de otro revisionista, Juergen Graf en Suiza en el año 1998.

Este sujeto mantuvo durante toda la década una intensa actividad neonazi con la difusión de propaganda básicamente encaminada a negar con diversos argumentos la existencia del holocausto. Por ejemplo, entre sus perlas niega que los nazis utilizaran el gas Ciclón B con personas, o que el holocausto no fue nada más que una gran decepción para el pueblo alemán

En el año 2000, las autoridades judiciales austriacas dictaron una orden de busca y captura contra Froehlich lo que le obligó a pasar a la clandestinidad hasta junio de 2003 fecha en que la policía pudo finalmente arrestarle. Durante estos tres años siguió con sus actividades delictivas neonazis como la distribución de un CD con todos sus escritos de propaganda neonazi entre más de 800 empresas y organizaciones austriacas, muchas de ellas juveniles.

Si Froehlich es declarado culpable, podría afrontar hasta 10 años de prisión, aunque el Centro Documental de la Resistencia Austriaca no espera más de 3 años, de hecho otros casos similares como el del revisionista Walter Ochensberger se saldaron con no más de 8 meses en prisión de los 2 años previstos en la sentencia.

Uno de los responsables de la ong antinazi Michael Lasek mostró su preocupación pro el crecimiento de los grupos neonazis en su país.