Esta menor, condenada a 8 años de reclusión, disfruta, desde hace dos meses, de permisos judiciales para ver a su padre enfermo. Morgades considera que es necesario "explicar en detalle a la sociedad" las circunstancias del permiso para que no se reproduzca "la alarma social que la Ley del Menor ha motivado".

"La Petición al Consejo General persigue una aclaración de lo sucedido para evitar el escándalo que la ausencia de explicaciones está produciendo en la ciudadanía", subrayó Morgades. "Estoy convencido de que el juez ha
buscado la filosofía de la ley, es decir, dar los pasos adecuados en la recuperación de la menor con el debido informe de los servicios técnicos",
continuó.

Además, el Defensor del Menor explicó la necesidad de que se ahonde en la perniciosa y falsa sensación de impunidad con que los menores observan la aplicación de esta ley. "Estas circunstancias ponen de manifiesto la necesidad de aprobar y publicar ya el Reglamento de desarrollo de la Ley 5/2000 modificada por la 7/2000 y 9/2000", añadió.

El artículo 55 de esta ley hace referencia a los permisos ordinarios y extraordinarios que podrá disfrutar el menor "a fin de mantener contactos
positivos con el exterior y preparar su futura vida en libertad". Por otro lado, el derecho establecido en el apartado H del artículo 56 indica la comunicación libre con sus progenitores, recordó Morgades.