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Una marcha neonazi acaba con disturbios y casi un centenar de detenidos en Berlín

    Berlín. (EFE).- La manifestación convocada hoy en Berlín por el ultraderechista Partido Nacional Democrático (NPD), paralela a varias concentraciones izquierdistas del Primero de Mayo, derivó en disturbios con la policía y otros manifestantes, con un saldo de casi un centenar de detenciones y varios heridos.

El contingente policial que custodiaba a los neonazis, formado por unos 2.000 agentes, tuvo que hacer uso de cañones de agua y porras para separar a los ultraderechistas y grupos de manifestantes de izquierda. La marcha neonazi, que discurría por un barrio del extremo este, quedó disuelta prematuramente, ya que grupos de izquierdistas les salieron al paso al grito de "Nazis raus" (nazis fuera).

Varios contenedores de basura y un automóvil ardieron, los ventanales de dos sucursales bancarias saltaron por los aires y algunas estaciones de metro de la zona quedaron cortadas al tráfico. El poscomunista Partido del Socialismo Democrático (PDS), dominante en ese distrito, había llamado a plantar cara a los neonazis y la policía tuvo que emplearse a fondo para separar ambas concentraciones, de un millar de participantes cada una.

La víspera del Primero de Mayo, la policía actuó ya con contundencia para evitar que la fiesta de la denominada Noche de Walpurgis acabase en graves disturbios. Pasada la madrugada, se produjeron escaramuzas cuando grupos de jóvenes, algunos con el rostro tapado, lanzaron botellas y piedras contra los antidisturbios al final de una fiesta que había concentrado a 4.000 personas. Los incidentes se saldaron con otro centenar largo de detenidos y 58 agentes con heridas leves.

Un contingente formado por 8.000 agentes se mantendrá alerta hasta el domingo, ante el temor a nuevos disturbios en el barrio multiétnico de Kreuzberg, donde desde 1987 el Primero de Mayo acaba en batalla campal entre antidisturbios y alborotadores.