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Rusia consigue que se apruebe resolución contra el neo-nazismo

    La resolución, copatrocinada por Rusia y Bielorrusia y aprobada por 36 votos, 13 en contra y 4 abstenciones, expresa inquietud, aunque no menciona países, por la erección de monumentos y la celebración de manifestaciones públicas de antiguos miembros de las SS, cuerpo que Hitler utilizó como instrumento de terror en los campos de batalla, pero también en los de concentración.

Entre los países latinoamericanos votaron a favor Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, Cuba, México, Paraguay y Perú mientras que se abstuvieron Guatemala y Honduras. También se pronunciaron por el sí el bloque africano, así como los países árabes y asiáticos, entre ellos China, Pakistán y la India. Fuentes diplomáticas occidentales habían expresado anteriormente su disgusto por esa resolución, en la que vieron una "pataleta" de Moscú en respuesta a otra presentada por la Unión Europea sobre la situación de los derechos humanos en Chechenia, que, sin embargo, no prosperó en una votación celebrada ayer, jueves.

En concreto, esas fuentes criticaron que en su redacción inicial hubiese una velada alusión a Letonia al señalarse en el texto que "en muchos casos, tan deplorables actividades" se produjesen "con pleno conocimiento y con la connivencia de las autoridades del Estado". Finalmente, Rusia y Bielorrusia aceptaron omitir esa alusión a una de las tres repúblicas bálticas ex soviéticas, cuyo reciente ingreso en la OTAN Moscú considera poco menos que una provocación de Occidente. "Los rusos se han pasado y han mostrado su rostro más feo", dijeron esas fuentes a propósito del documento.

El texto finalmente aprobado repudia las actividades neonazis y neofascistas así como los prejuicios nacionalistas, "que no pueden justificarse bajo ninguna circunstancia" y señala que "esas prácticas no hacen justicia a la memoria de las víctimas incontables de las SS y envenenan las mentes de los jóvenes". Además "alimentan las formas contemporáneas de racismo, discriminación racial, xenofobia e intolerancia y contribuyen a la difusión y multiplicación de partidos, movimientos y grupos extremistas, incluidos los neo-nazis y cabezas rapadas".