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El objetivo de estas consultas era discutir este tipo de cuestiones de manera "abierta, constructiva y equilibrada". En ellas, la UE elevó los problemas que ve en materia de Derechos Humanos en territorio ruso, mientras que Rusia se quejó de la situación de sus minorías en el interior de la UE, en especial, los países bálticos.
"La UE ha manifestado sus preocupaciones específicas en lo que concierne la situación en materia de Derechos Humanos en Rusia, sobre todo la situación en Chechenia, la independencia de los medios, la situación de los defensores de los Derechos Humanos, así como el fenómeno del racismo, la xenofobia y el antisemitismo", se indicó en el texto.
Ante las críticas de Moscú por la situación de las minorías rusas en el seno de la UE, la delegación europea respondió que ambas partes dieron la bienvenida a la adhesión a la UE de los nuevos socios del Este, al ser una "garantía a favor de la protección de los Derechos Humanos y de las personas que pertenecen a minorías".
La presidencia de turno de la UE aseguró que las discusiones fueron "productivas" y que se produjeron en una atmósfera "amistosa". En este sentido, anunció que las próximas reuniones de este foro se producirán a lo largo de este año 2005.
Estas conversaciones abordaron igualmente los preparativos de la reunión anual de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra en marzo y abril, así como la cooperación de ambas partes con el Consejo de Europa y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
La portavoz oficial de la Comisión Europea, Françoise le Bail, indicó la pasada semana que la política de la UE hacia Rusia "no es muy diferente" a la que defendió en Bruselas el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, en lo que se refiere a exigir un mayor respeto de los Derechos Humanos y de la libertad de prensa.
"En nuestros contactos con Rusia siempre hemos mencionado nuestras preocupaciones sobre Chechenia, sobre los Derechos Humanos. Siempre hemos subrayado nuestro apego a la democracia y a la libertad de prensa", dijo Le Bail.
El presidente estadounidense exigió a Rusia que respete los Derechos Humanos y tenga una prensa "libre e independiente" en vísperas de la entrevista que mantuvo en Bratislava con el presidente ruso, Vladimir Putin.
El Ejecutivo comunitario consideró que no es necesario que EEUU defienda a los Estados bálticos del expansionismo de Rusia, ya que "la UE habla a Rusia con una sola voz y los bálticos forman parte de ella". Además, Le Bail hizo hincapié en que la política de la UE hacia Rusia "cuenta con el acuerdo de los bálticos".
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