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A base de golpes, patadas e insultos un grupo de cinco estudiantes del IES Gilabert Centelles de Nules sembró de hematomas el ambdomen y el resto del cuerpo de la niña de nacionalidad marroquí Sara Omari, de quince años de edad y vecina de Moncofa.
La brutal paliza tuvo lugar a las tres de la tarde del pasado jueves justo al finalizar las clases y cuando los estudiantes se disponían a coger el autobús de regreso a Moncofa, puesto que los agresores también residen en la misma localidad que la víctima. Al parecer, minutos después llegaron agentes de la Policía Local de Nules quienes avisaron a la de Moncofa puesto que los jóvenes habían amenazado con volverle a pegar nada más bajase del autobús en Moncofa, según señalaron fuentes del consistorio moncofense.
Así pues, hasta la parada del autobús se dirigió enseguida un dispositivo policial de Moncofa a la espera de que llegase el vehículo con los estudiantes. Al ver a la menor, los agentes comprobaron que presentaba múltiples hematomas y dolores abdominales, por lo que la acompañaron hasta su domicilio para informar a los padres de lo ocurrido y trasladarla al médico. Finalmente, Sara salía casi de madrugada del hospital de la Plana de Vila-real con un parte médico que daba testimonio de las lesiones sufridas, que no son graves.
Tras conocer lo ocurrido, la Policía Local de Moncofa redactó las primeras diligencias y puso el caso en conocimiento de la Fiscalía de Menores. Cabe destacar que los cinco menores que agredieron a la joven magrebí han sido identificados, y según manifestó ayer la víctima, el acoso no es de ahora, sino que llevan ya cuatro años amenazándola e insultándola.
Sara: «Estoy harta»
Más de hora y media estuvo ayer por la tarde Sara Omari junto a su madre, Miriam Azad, en el cuartel de la Guardia Civil de Moncofa donde presentó denuncia y prestó declaración. A su salida, la joven estudiante manifestó su dolor y desesperación por lo ocurrido: «estoy harta, son ya cuatro años sufriendo, insultándome, pegándome, amenazándome y llamándome negra, diciéndome vete a tu pueblo mora».
De hecho, su padre, Ali Omari, que fue a recogerlas aseguró que han denunciado en más de una ocasión amenazas e insultos que ha sufrido su hija: «llevamos muchos años aquí, en el colegio le ocurría y lo dijimos, y también lo sabe el director, esperamos que ahora se haga algo».
Por su parte, Sara explicó que el grupo de jóvenes que la agredió está formado por españoles y extranjeros, además de una chica, «son los mismos de antes». De hecho, la joven quería ir a un instituto de Vall d'Uixó, aunque tal como señaló su padre, «no hay autobús».
La familia llegó a Moncofa hace siete años, y además de Sara tienen más hijos que según ellos también han recibido insultos en el colegio. No obstante, han asegurado que es un grupo de jóvenes en concreto el que ha agredido a su hija, pero que por lo demás se sienten bien acogidos en Moncofa, «no hemos tenido más problemas aquí por ser extranjeros, no hay racismo».
Así las cosas, aunque según explicó Miriam Azad cuando su hija iba al colegio «tenía miedo», tras lo ocurrido Sara asegura que seguirá yendo al instituto y cuando acabe quiere estudiar periodismo.
Protección e integración social
Tras la agresión sufrida por Sara Omari, desde la concejalía de Interior de Moncofa enviaron también ayer una patrulla de la Policía Local a la parada del autobús que llega de Nules.
No obstante, por su parte, Vicent Esteve aseguró que se trata «de un caso aislado, que se está investigando y que se ha puesto a disposición de la Fiscalía de Menores, y como cualquier otro caso de violencia lo condenamos y se actuará en consecuencia». Por ello, el titular de Interior y también de Educación desestimó que sea un brote de racismo en la localidad, «es más un caso de violencia escolar de un grupo de jóvenes bastante conflictivos, incluso algunos de ellos inmigrantes, hacia esta chica en concreto, ya que no ha habido problemas con otros extranjeros».
En sintonía con lo explicado por Esteve, el alcalde José Vicente Isach, señaló que los inmigrantes en Moncofa «están muy integrados» y recalcó que lo ocurrido «ha sido un hecho puntual del que ya se ha dado conocimiento a la Fiscalía y que se está investigando». En este sentido, Isach señaló que uno de estos jóvenes ya era «problemático» cuando iban al colegio, y de ello se informó a los padres.
La conselleria de Cultura, Educación y Deportes manifestó en un escueto comunicado que investigará los hechos, acaecidos en el exterior del instituto de Nules, y aplicará las medidas oportunas a los escolares implicados en la agresión y se depurarán responsabilidades.
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